15/01/2018
ASEJA participa en el tercer Laboratorio del Foro Medio Ambiente y Sostenibilidad, antesala del Foro de las Ciudades de Madrid 2018.
El tercer Laboratorio FSMS, vinculado por su temática al Foro de las Ciudades de Madrid, abordó la cuestión de la renaturalización de las ciudades, las infraestructuras verdes y una nueva mirada sobre la aportación de los ecosistemas naturales a la calidad de vida de la ciudadanía y a la mejora de los entornos urbanos.
En el encuentro participaron entre otros Nuria Bautista, consejera técnica de la Dirección General de Gestión del Agua y Zonas Verdes del Área de Gobierno de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid; Ana Luengo, vicepresidenta de la Asociación Española de Parques y Jardines Públicos (AEPJP); Francisco Javier Sigüenza, secretario general de la Asociación de Empresas de Parques y jardines (ASEJA); Iñaki Viñuela, vocal del Comité Ejecutivo de la Asociación Española de Paisajistas (AEP) y Alberto Sanz, profesor de la ETS de Ingeniería Agronómica, Alimentaria y de Biosistemas de la UPM.
La nueva mirada sobre la gestión de la naturaleza en las ciudades va mucho más allá del hasta ahora denominado mantenimiento de zonas verdes que, además, suele ser una de las partidas presupuestarias municipales más exiguas. Frente al reto de entender y tratar la naturaleza urbana desde otras perspectivas, aparecieron en este Laboratorio FSMS una buena cantidad de ideas y acercamientos al cambio de paradigma, tan necesario (por ejemplo por cuestiones de calidad del aire o resiliencia frente al cambio climático) como demandado por la ciudadanía, cuya participación es imprescindible para apoyar y asumir la transformación “verde” de las ciudades.
Una de las principales conclusiones del Laboratorio fue que, debido a su complejidad, la naturaleza urbana se ha de entender como una inversión, no como un gasto, dado que provee de servicios ecosistémicos beneficiosos para el entorno urbano y la ciudadanía, existiendo además la necesidad de trabajarla (y comprenderla) con una mirada estratégica a largo plazo por encima de cambios de gobiernos locales o responsables políticos, pasando del enfoque tradicional de la gestión de parques y jardines a hablar de la infraestructura verde urbana. Este cambio de paradigma obliga a los gestores públicos y a las empresas involucradas a entender la naturaleza urbana como un elemento más de la ciudad interconectado con la movilidad, el consumo de energía, la gestión de recursos tan sensibles como el agua, la calidad del espacio público y la participación ciudadana, por mencionar tan solo algunos elementos de nuestras ciudades implicados, a lo que habría que añadir el uso de la tecnología disponible para mejorar la eficiencia de los procesos y las aportaciones que la renaturalización puede aportar y promover en el terreno de la innovación social.
Francisco Javier Sigüenza, en representación de ASEJA , puso sobre la mesa el valor que aportan las empresas que trabajan con los municipios para gestionar y mantener sus espacios verdes, recordando que en 2018 su organización firmará un acuerdo de colaboración con la FEMP para elaborar un estudio en profundidad sobre la gestión de las infraestructuras verdes urbanas, un trabajo que se sumará al recientemente presentado junto a AEPJP y la Red de Gobiernos Locales por la Biodiversidad sobre el análisis de la conservación de las infraestructuras verdes en las ciudades españolas. Sigüenza, al igual que hicieron otros participantes, también señaló el hecho de que las partidas presupuestarias municipales para la gestión de los espacios vedes suelen ser de lo más escuetas. “Muchas veces no se considera el espacio verde como un servicio público, lo que dificulta proyectarlo a largo plazo para realizar las necesarias inversiones, además de necesitar marcos legislativos que permitan mejorar en esta dirección. En este sentido, tendremos importantes cambios con la nueva Ley de Contratos del Sector Público recientemente aprobada”, apuntó el representante de ASEJA.